La decoración con telas se puede aplicar a distintos espacios, hoy hablaremos de las diferentes técnicas que existen para decorar los techos utilizando este recurso.
Drapeados
Una forma muy sencilla de vestir un espacio, especialmente un salón de eventos o una carpa. Suaviza las estructuras de techo como cerchas o vigas en tejados y envuelve en un halo de suavidad techos interiores tradicionales. Su caída espontánea permite añadirle una iluminación ligera que se tamiza a través de la tela creando juegos de luces y sombras.
Efecto Globo
Este estilo más contemporáneo crea ambientes suaves y nebulosos con cierto aire futurista, válido tanto para el hogar como para espacios comerciales. Esta forma de colocar las telas cran un mundo onírico para los niños en sus habitaciones, mientras que en los negocios se consigue cierto aire minimalista.
Bastidores entelados
Si lo que queremos es una forma distinta de utilizar las telas, hacerlo en bastidores es un sistema muy efectista para decorar el techo, especialmente si se trata de la habitación de los más pequeños. Consiste en prender en los clásicos bastidores de costura, retales de diferentes telas de colores o estampados, creando un conjunto con ellos que se fijrá al techo con un hilo sedal o similar, creando una imagen flotante.
Abullonados
Un estilo más pomposo y glamuroso que se puede adaptar tanto a habitaciones infantiles como adultas. Según el color elegido se conseguirá un aire más infantil o más íntimo. Para conseguir este efecto hay que fijar, desde el punto central de la habitación o justo encima de la cama, diferentes telas que radien hacia el perímetro del techo dejando una ligera caída. El efecto conseguido es una caída de las telas suave con volumen.
¿Cuál de todos aplicarías?